A los 24 años, se dedica a trabajar codo con codo en el obrador con su padre José Mari Gorrotxategi, realizando diversos cursos de Confitería y Chocolatería en Alemania, Francia y a nivel nacional. A finales de 2016 Rafa puso en marcha su propio obrador en el Polígono Usabal en Tolosa, lo que supuso un salto adelante en calidad e innovación. Siempre nos intenta sorprender con nuevos productos y novedosos maridajes que pretenden llevar la repostería artesana a niveles de alta gastronomía. Lleva años demostrándonos que la alta chocolatería no tiene misterios para él, ahora nos demostrará que la alta confitería, tampoco.